Los estudiantes radicalizan su protesta tras las expulsiones de la Autónoma
19/12/2008[print_link]
Alumnos anti-Bolonia ocupan la sede del comisionado de Universidades y cortan la autopista AP-7, en Bellaterra, la Diagonal y la Gran Via en Barcelona
La expulsión de seis alumnos de la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB) por cometer presuntamente actos violentos en el campus durante las protestas anti-Bolonia (contrarias al proceso de convergencia de los estudios universitarios en Europa) de la pasada primavera intensificó ayer las protestas estudiantiles.
La expulsión de seis alumnos de la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB) por cometer presuntamente actos violentos en el campus durante las protestas anti-Bolonia (contrarias al proceso de convergencia de los estudios universitarios en Europa) de la pasada primavera intensificó ayer las protestas estudiantiles. Hubo cortes de tráfico en varios puntos de los accesos a Barcelona y un encierro.
A mediodía, dos centenares de estudiantes de la UAB cortaron la autopista AP-7 a su paso por Bellaterra para protestar por las expulsiones. El corte se hizo sin violencia a hora punta: entre las 12.00 y las 13.45 horas, y se produjeron retenciones de hasta ocho kilómetros. Tras el corte en la autopista, los alumnos se dirigieron al rectorado, donde realizaron un mitin. El rectorado está ocupado desde hace semanas por un centenar de alumnos.
En Barcelona hubo cortes de tráfico en la avenida Diagonal, en la Gran Via y en el túnel de la Rovira. En la Gran Via, la acción estudiantil se desarrolló a la altura de la plaza de la Universitat, donde está el rectorado de la Universidad de Barcelona (UB) y en el que mantienen un encierro desde hace un mes un grupo de estudiantes.
Además, unos 40 estudiantes irrumpieron en la sede del Comisionado de Universidades de la Generalitat, en la Via Laietana hacia las tres de la tarde. La comisionada, Blanca Palmada, no se encontraba en la sede durante la ocupación, que acabó a las 20.30 horas.
La protesta en la avenida Diagonal, vigilada de cerca por los Mossos d’Esquadra, obligó a los agentes policiales a intervenir para despejar la vía. Todas las protestas se hicieron de manera coordinada a través de las distintas asambleas de estudiantes.
En Lleida y Girona, en cambio, los estudiantes abandonaron sus encierros. En la capital del Segrià, llevaban nueve días encerrados en el edificio del rectorado y abandonaron la protesta después de haber acordado con el equipo de gobierno un calendario de negociaciones para estudiar de qué manera se adaptan las titulaciones al Espacio Europeo de Educación Superior, informa Lluís Visa.
En la Universidad de Girona un centenar estudiantes que ocupaban la facultad de Educación y Psicología decidieron abandonar el encierro hasta pasadas las fiestas navideñas, informa, Natalia Iglesias.
Las clases acaban hoy en todos los centros, pero los estudiantes encerrados en Barcelona aseguran que piensan mantenerse en su actitud en varias sedes de la UB y la UAB.
En la facultad de Letras de la UAB no hay clases desde ayer. El rectorado ha decidido adelantar las vacaciones para evitar disturbios. El miércoles, una treintena de personas irrumpieron en el decanato de esta facultad y lanzaron huevos y pintura contra las puertas. Algunos alumnos que se encontraban ayer en la facultad de Letras criticaban que durante los últimos días no se les ha permitido realizar las clases en el aula y hayan tenido que hacerlas en despachos y otras dependencias.
Los alumnos expedientados y los 22 que han sido castigados con amonestaciones públicas en la UAB tienen dos meses para recurrir la decisión del rector Lluís Ferrer ante los juzgados contencioso-administrativos. Éstos tienen potestad para suspender cautelarmente las sanciones, que por el momento no tienen fecha de aplicación. Eso sí, La UAB tiene previsto ponerles fecha en breve.
19/12/2008
Los estudiantes colapsan Barcelona y toman la sede de las universidades
Rectores y Gobierno catalán anuncian la creación de una mesa de debate y diálogo para reconducir el conflicto
El recrudecimiento de las protestas contra Bolonia obligó a los Mossos d’Esquadra a actuar con contundencia
Las protestas contra el plan Bolonia se recrudecieron ayer al cortar los estudiantes el tráfico en varias vías del área de Barcelona provocando el caos circulatorio y entrar en el interior de la sede del Comisionado de Universidades. Lo hicieron el mismo día en que la Generalitat y los rectores lanzaron una nueva oferta de diálogo para reconducir el conflicto, del que se cumple casi un mes. Las dos partes han anunciado la creación de una mesa de debate y diálogo para mejorar la situación.
Los actos violentos de ayer se sucedieron como reacción directa al anuncio de que la Universitat Autònoma de Barcelona (UAB) expulsará a seis de los estudiantes que participaron en los altercados en el campus de la pasada primavera. Varios centenares de alumnos cortaron algunas de las principales vías de Barcelona, como la Gran Vía y la Diagonal, además de la AP-7 y la B-30, en Bellaterra.
La protesta más multitudinaria registrada en Barcelona es la que ha tenido lugar en la Diagonal, en la zona universitaria, cuando unos 200 estudiantes bloquearon el tráfico durante casi dos horas en los dos sentidos, provocando importantes retenciones. «Si expulsáis a uno, expulsados a todos» y «Somos estudiantes, no terroristas» son algunos de los eslóganes de las pancartas que llevaban los manifestantes. Tras desplazarse por la Diagonal durante varios metros en manifestación, los estudiantes llevaron a cabo una sentada frente a la Facultad de Químicas y no depusieron su actitud hasta que los Mossos d’Esquadra decidieron sacarlos de la vía por la fuerza.
En la Gran Vía, los estudiantes instalaron los bancos que sacaron de la Universitat de Barcelona (UB) y simularon una clase. Poco después, unos 50 universitarios de este grupo bajaron por la Via Laietana hasta el Comisionado de Universidades de la Generalitat para ocupar sus dependencias.
Descuido del vigilante
Los estudiantes entraron en el comisionado, aprovechando que la puerta se abrió por un descuido del vigilante, con algún carro de supermercado lleno de comida -fruta y una gran cazuela con lentejas-, mientras que también llevaban consigo esterillas y algún saco de dormir.
Los cortes de tráfico, que provocaron importantes retenciones de vehículos, se produjeron de manera simultánea, y en el caso de la Diagonal fue necesaria la intervención de los Mossos d’Esquadra para desalojar a los estudiantes de la vía por la fuerza. Hasta el momento, sin embargo, se desconoce si en la carga hubo heridos.
La protesta y los enfrentamientos posteriores tuvieron lugar poco después de que en la mañana de ayer el Gobierno catalán y los rectores de las universidades anunciaran la creación de una mesa de debate y diálogo en la que estarán representados los diferentes sectores de los estudiantes para reconducir el conflicto.
Grupos anti-Bolonia se encierran durante 6 horas en Universitats
ORDI CASABELLA / SARA GONZÁLEZ
BARCELONA
En una nueva muestra del comportamiento errático del movimiento anti-Bolonia, unos 800 estudiantes causaron ayer graves alteraciones del tráfico al cortar la AP-7, a la altura del campus de Bellaterra de la Autònoma (UAB), la Gran Via y la Diagonal, en Barcelona, en protesta por las expulsiones de seis alumnos que han participado en actos violentos en la UAB, a la misma hora en que la comisionada de Universitats del Govern, Blanca Palmada, y los rectores les ofrecían participar en una mesa sobre la aplicación del proceso de Bolonia. Lo sorprendente es que los representantes de los sublevados estaban advertidos del anuncio y que este contaba con su aprobación. Y aún resulta más desconcertante, si cabe, que dos horas más tarde unos 40 alumnos tomaran la sede de la comisionada, donde permanecieron casi seis horas.
Los asaltantes solo abandonaron las dependencias oficiales después de que la Conselleria d’Innovació i Universitats aceptase difundir un comunicado sobre las expulsiones en el que se decía que “el proceso a los sancionados se sigue con atención para que tenga todas las garantías del Estado de derecho” y que la UAB “no ha previsto una ejecución inmediata de la resolución y está hablando con los alumnos afectados”. A la salida pidieron a gritos la dimisión de Palmada mientras cortaban el tráfico en la Via Laietana.
Todo ello sucedió el día en que, tras tres semanas de encierro, la Facultad de Letras de la UAB era desocupada y se desactivaban las protestas que se llevaban a cabo en las universidades de Girona y Lleida. A las puertas de las vacaciones, los focos de la revuelta quedan ahora reducidos a los rectorados de la Universitat de Barcelona (UB) y la UAB, donde resisten unas decenas de alumnos.
La acción de protesta más numerosa fue la más breve. Medio millar de estudiantes de la UAB interrumpieron a mediodía el tráfico de la AP-7 durante media hora. Los automovilistas que circulaban por la Diagonal de Barcelona, a la altura de la zona universitaria, corrieron peor suerte: la circulación estuvo suspendida durante cerca de dos horas, en ambos sentidos de la marcha, y la normalidad no regresó hasta que intervinieron los mossos.
Tras cortar la Gran Via, frente al edificio histórico de la UB, una cincuentena de estudiantes de desplazaron hasta la plaza de la catedral y, en un descuido de los empleados, la mayoría logró introducirse en la sede de la comisionada para las universidades, que ocupa dos plantas de un edificio vecino.
Fuentes conocedoras del conflicto que nació en la UAB hace algunos meses, cuando las protestas contra la puesta en marcha del espacio europeo de educación superior derivaron hacia actitudes violentas por parte de una minoría, sostienen que únicamente “la división” del movimiento estudiantil explica los vaivenes de su comportamiento. “Hay un sector deseoso de dialogar para poder arrancar algunos compromisos que convive con otro que no quiere hablar y solo persigue generar tensión”, señalaron.
EN BUSCA DEL PACTO
La explicación resulta muy plausible a la vista de lo ocurrido ayer. A partir de las reuniones celebradas días atrás por parte de la comisionada, el rector de la UAB, Lluís Ferrer, y el de la Pompeu Fabra (UPF), Josep Joan Moreso, que actuaba en nombre de la asociación de rectores catalanes, con representantes del colectivo estudiantil, entre los que figuraban delegados de los encerrados, se había llegado al compromiso de crear una mesa conjunta “para garantizar una aplicación armónica y coordinada de los cambios a los que se ha de enfrentar la universidad”. Se trataba de alcanzar un pacto para liquidar los encierros y garantizar una mayor participación de los estudiantes en la aplicación del plan de Bolonia.
okupation du siège du”Comisionado” des universités, coupent l’A.7 a Belleterra(Barcelona), Gran via et Diagonal également à Barcelone.
Affrontements avec la police autonome catalane (Mossos d’Escuadra) à Diagonal( Barcelona)
Les blokages surviennent après la condamnation par les tribunaux de six étudiant(e)s pour actes de violence commis lors des okupations de facs en Mai dernier.
Fin provisoire des okupations à LLeida et Girona(Catalunya), fermetures de certaines facs jusqu’à après vacances de noêl.
Suite des mouvements à Valencia et Madrid avec okupation dans la capitale de l’état de L’Université Complutense, et dans la capitale Levantine(Valencia) manifestation en solidarité avec les élèves expulsées et/ou inculpées.